La ultima entrega de Perez-Reverte de las aventuras del Capitan Alatriste es menos interesante que los otros libros publicados, sin embargo sin pretender ser una novela historica pude disfrutar y aprender de ciudades y puertos de la epoca que en el relato del autor toman colorido y vida propia. La relacion entre el Capitan e Iñigo se torna dificil, pues el "rapaz" ha dejado de ser un niño y a sus 17 años se va ganando el respeto de sus camaradas en la galera o el cuartel, a su edad se cree que ya lo sabe y ha visto todo, se molesta con el capitan pues este sigue hablandole y aconsejandole como si fuese aun un mozalbete. Iñigo descubrira mas adelante como el combatir ferozmente como soldado y ganarse el respeto no lo libra de los temores y miedos cuando las tres galeras Españoles tienen que enfrentarse a seis naves turcas y el se imagina que ese combate seria su final, como lo pensaron todos, con la excepcion de que Alatriste, Copons, el moro Gurriato ven la fatalidad de su destino como algo inevitable que les dara alcance el cualquier momento y esa conviccion de soldado viejo, es la que no tiene Iñigo quien sigue sonando en Alquezar, en casarse y tener otro final y no la del soldado que muere en combate.
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